Sobre el puente de Avignon
todos bailan, todos bailan.
Sobre el puente de Avignon
todos bailan y yo también
(Antigua canción infantil)
Todos los actores sociales reclaman fondos estatales. La mayoría demandan mayores o nuevas asignaciones de fondos. Otros reclaman reducción de impuestos. Ambos convergen en el presupuesto, el del ejercicio actual y el del próximo año, aumentando la diferencia entre ingresos y egresos. El gasto público ha estado creciendo a un ritmo mucho mayor que el de la recaudación impositiva agrandando el bache fiscal y, además, llevando el nivel del gasto a niveles muy altos. Gran parte de las demandas recaen sobre el denominado gasto social, la parte del gasto del Estado[1] que se destina a “servicios sociales”.
Los datos del Ministerio de Hacienda y Finanzas muestran que el gasto primario del sector nacional del mes de octubre último creció unos $ 64.537,6 M y los ingresos primarios lo hicieron en sólo $ 23.756 M perfilando un resultado primario sin las denominadas rentas financieras ( pago de intereses de la deuda pública, ingresos por utilidades del BCRA, ingresos producidos por el Fondo de Garantía de Sustentabilidad) de – $ 62.958,7 millones, por encima del déficit observado en octubre del año pasado en $ 40.781,6 M. Incorporando las rentas financieras el déficit de octubre trepa a – $ 77.500,46 M, que representa un aumento de $ 59.738,4 M. Sigue leyendo